“Batalla de Ibirapuera”, presentada en la 29ª Bienal de São Paulo, es un desdoblamiento de las instalaciones “Visiones del Paraíso” y “N Cruzi Lounge”. Fueron ofrecidos al público confetis y serpentinas, que pudieron ser lanzados, como ocurre en las batallas del Carnaval, proponiendo un desplazamiento de la propuesta curatorial de la Bienal, de arte y política, para la celebración de la fiesta popular como elemento transformador, como política de la dicha. En la instalación, plásticos azules sugerían caminos, haciendo relación con las expediciones históricas conocidas como “entradas y banderas”, originadas en São Paulo, y dialogando con el paisaje de palmeras. El trabajo contó con la participación del DJ Zé Octávio y del músico James Kunja, creando una relación sonora con el espacio.